Tras el cérvido que vive más alto

Por las cumbres andinas en busca de El Dorado

Cadena Montañosa: Cordillera de los Andes Centrales
Zona: Valle Sagrado
Altura: 4001 - 4500
Organizador: GRZ Hunting Adventure

Antonio Adán Plaza

Calidad de trofeos: Muy buena. Cuatro ejemplares cazados. Juanjo Garoz un buen Luicho de ocho puntas. Mi mujer un tremendo ocho puntas que ha sido el record del viaje. Por mi parte dos venados grises. Un primero selectivo muy viejo de unos 10 años y otro gran seis puntas largo, grueso pero asimétrico. 
Densidad: Media. Muy distribuidos, difíciles de localizar. Animales muy ariscos y esquivos.
Terreno: Dificultad alta, zonas escarpadas, con desniveles diarios de 800-900 m. Pajonales, pastizales de altura y zonas agrícolas abandonadas o de cultivo. Siempre por encima de 3.800 m. 
Tienda de campaña: No
Media de horas diarias andando: Entre 6-12 horas. La altitud exige buena aclimatación y cierta forma física. El acercamiento al área de caza es en coche y subes hasta los 3.500/3.600 aproximadamente. 
Hospedaje: Alojamiento en casas rurales adaptadas para cazadores, muy cómodas y bien acondicionadas. Ideal para ir con la familia.
Comida: Excelente. Guisos andinos caseros, productos frescos locales y trato muy familiar.
PH y guías: Guías y ayudantes locales muy serviciales. Aunque no tienen gran experiencia profesional, su conocimiento del terreno es clave. El organizador coordina todo perfectamente.
¿Recomendaría?: Sin duda. Una experiencia de alta montaña auténtica y distinta. Ideal para quien quiera vivir una caza técnica, con animales esquivos y tiros largos, en un entorno cultural y paisajístico único.
Extras: Posibilidad de visitar Machu Picchu, Valle Sagrado de los Incas, Cuzco o mercados tradicionales. Caza y turismo perfectamente combinables.
Lo peor: La altitud. Hay que ir preparado física y mentalmente. Es recomendable aclimatar un par de días antes de empezar a cazar.
Clima: En estas fechas frío por las mañanas y noches, con temperaturas de hasta -2°C en las cotas más altas. Alguna lluvia y granizo. Durante el día, más templado si hace sol.
Disparos: Largos, por encima de los 300 m en la mayoría de las ocasiones. Buen visor y torreta, imprescindibles. Allí tienen equipos perfectos. 
 

Una aventura distinta, exótica y muy completa. El venado gris andino es todo un desafío, y la experiencia global la convierte en un destino muy recomendable para cazadores experimentados y amantes de las montañas que buscan una pieza de altura distinta, más allá de los tradicionales íbices, carneros o rebecos.

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